Los Reyes no lloran.
La intención era escribir esto en cuanto tuviera el dato duro del resultado final del inventario, ese pequeño dígito que representa la frontera entre alcanzar o no el objetivo propuesto. Pero a más de una semana del evento, aun no se a ciencia cierta cómo nos fue. Tengo la certeza lógica de que alcanzamos el objetivo, incluso el Gerente nos cumplió con la prometida carne asada, y ya se respira la calma en la tienda. Por eso es que decidí no esperar más y dar por terminado, al menos por este año y los próximos 7 meses, todo lo que tenga que ver con los inventarios semestrales.
Y para cerrar, un masoquista vídeo para no olvidar esos buenos momentos:
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