Nada especial

Mañana es mi día de descanso, y por tanto es la noche en que puedo desvelarme sin culpa alguna. Pero no. Hoy tengo sueño. Sueño, y absolutamente nada interesante que decir. Estos últimos días han estado serenos, sin mayores sobresaltos.

En medio de la repentina moda de los asesinos seriales (¿cereales?), de lo aburrido de las campañas políticas, del interesantísimo asunto de la boda de Ana Bárbara y de que últimamente los narcos están dejando más muertos por separado que un atentado terrorista en forma, no hay más que resaltar, que no sea las variaciones de la rutina. En Soriana, me peleé con un paqueterito, porque el estúpido se quiso pasar de listo conmigo, y no le salió su juego. Además, por dos semanas consecutivas, he sido rankeado como el mejor cajero de la tienda.

La mayor parte de mi tiempo de ocio la he pasado sentado frente al computador, acomodándo los muchos mp3's que tengo, e intentando abrir espacio. Es evidente que necesito un nuevo disco duro...

...y mi acostumbrada organización de papeles y copias del semestre pasado, sigue esperando. Estoy a una semana de ingresar a 8° Semestre, y por primera vez, no deseo volver. Pero al mal tiempo buena cara. Si hago caso a mis horóscopos, se avecinan cambios importantes en mi vida. Y si no, demandaré a las estrellas por no hacer bien su trabajo de iluminarnos el destino, jajaja.

También me la he pasado comiendo. Pero no se preocupen fans mios, sigo siendo delgado.

Ahora que lo vuelvo a pensar, he cultivado mi abandonado gusto (como tantos) por el cine. Y he visto buenas películas -y otras no tanto-. De entre todas, Monster ha sido la que más me ha impactado en mucho tiempo (digo, ya que estamos en la moda... pero valió la pena; sigo impactado de la historia, y sobre todo de esos últimos diez minutos).

Pero, definitivamente, nada especial ha trascurrido... ¡Ah! El sábado anterior fue mi día 9000 de vida... pero no me provocó lo suficiente ni siquiera para irme a tomar una chela. Eso sí, estoy preparándo unas listas próximas a publicar, sobre mis gustos y disgustos.

Pinche sueño. Ya me voy a dormir, nada tengo ya que hacer aquí.